Afortunadamente hasta ahora solo una pérdida de una vida humana, Cumanacoa ayer mostraba barro pordoquier y polvo al empezar a secarse el mismo; también mostraba el entusiasmo y el arrojo voluntarioso de sus habitantes avocados a la restauración y limpieza de sus viviendas, de las calles y espacios públicos involucrados activamente con los organismos institucionales activados para ello.
Es un nuevo reto que la población Monteana, enfrenta con entereza y que estimulado por las infinitas muestras de solidaridad contribuirá a restaurar su normalidad.
Desde este espacio vinculado profundamente, a los hechos de nuestras queridas comunidades, consideramos importante seguir reforzando el hábito, que ayer vimos en uso por ciudadanos activos en las labores de limpieza: el uso de tapabocas. Combinados lluvias, polvo y humedad propenderá a incrementar las enfermedades respiratorias que desde ahora debemos prevenir. Incluyamos en la lista de los centros de acopio la dotación de este sencillo pero valiosisimo insumo protector.
Fuerza Montes!!!
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